Aristas del humor
Es un misterio espontáneo no se lo puede frenar, contagiosa gimnasia del
alma para lo que tenga que venir:
Un fracaso laboral, un amor que se ha
marchado, un enredo familiar, y hasta en la
enfermedad, como palabra amiga
que justo viene a llegar, es como un
libro oportuno, es como un buen condimento, con cualquier comida va, es como un
canto que nace en un festivo ritual, ostensible a toda hora nada lo ha de
parar.
No tomarse sólo en serio, distracción
particular, es intención que anima, espacio pleno del alma de absoluta libertad
asemejándose a un sueño, toda regla ha de burlar
“Humor” que alivia rutinas
ayudando a convivir, “humor” que cierra conflictos y abre puertas, acorta
esperas, desbroza sobrantes, antídoto contra el ego y la absurda vanidad.
Capaz de girar drama, apenas con sonreír, es
perspectiva increíble que nos permite encarar lo que depare la vida el destino
o el azar, es la tangente perfecta, una coartada genial, la más sutil de las
fugas, un encuentro singular.
Para los niños es sangre, para el joven
es vital, para un adulto es alivio, para
los viejos crucial….
Ante el dolor del fracaso, lo que no pudo
llegar, lo que nunca se nos dio, incluso de lo más duro, lo que parece
tragedia, errores, confusiones,
desencuentros, tropezones y a cualquier desilusión, “a todo póngale humor”, solo de usted depende porque nunca se le
olvide; no hay cebolla que haga reír, y como dijo la hija de Octavio: Qué bueno al morirse..... morirse de risa.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario