Aristas de la integridad

   Debilidad occidental de fragmentar lo que es todo: cosas de la cabeza que son para la razón, las destrezas y gimnasias que al cuerpo van a formar y las recetas del alma al espíritu a parar.

  Psicólogos para el bocho, licenciados, pedagogos, profesores de gimnasia y consejero espiritual, no son compartimentos aparte, son parte de una unidad

¿Y quién se ocupa del hombre? ¿A quién verdadero maestro, de veras considerar?

   Padres, hermanos, entrenadores, terapeutas, profesores de materias, guías en general: para poder ser maestro, mejor dicho para poder ser humano, hay que integrar cuerpo mente y alma entera con la conciencia de un todo que es imposible de aislar

Naturaleza humana la de la integralidad,  sin embargo no es innata, es un bien que se trabaja, tarea por conquistar, quizás la meta más noble la de “ser”  siendo integral.

Te siento pero no  te entiendo, te entiendo  pero no te siento, entonces…te siento con la cabeza, te pienso con el corazón.